Vive mucho más que una noche de hotel.
Una ubicación estratégica en el corazón de la ciudad
Situado frente al Port Vell de Barcelona y con espléndidas vistas al mar Mediterráneo, el Duquesa Suites cuenta con una ubicación privilegiada en el corazón de la ciudad. Rodeado de antiguas callejuelas con encanto y de los principales monumentos y puntos de interés del barrio Gótico, es el punto de partida perfecto para conocer y disfrutar de la variada oferta cultural, gastronómica y de ocio de la ciudad.
Barcelona es una caja de sorpresas. En esta ciudad cosmopolita, llena de luz, vida y color, hay muchos lugares interesantes donde poder disfrutar. Los edificios modernistas, los parques, las plazas, los museos o los mercados gourmet te están esperando para que tu visita sea inolvidable. La Sagrada Familia, el Palau de la Música Catalana, la playa de la Barceloneta, la catedral o Las Ramblas son sólo una muestra que hacen de esta urbe una de las más bonitas del mundo.
Para facilitarte el recorrido y que saques el máximo partido a tu escapada, aquí te dejamos una lista de los espacios imprescindibles más cercanos al hotel que no deberías perderte.
Lugares de interés
Port Vell
La Barceloneta
Playa Barceloneta
Arc de Triomf
Las Ramblas
Gran Teatre del Liceu
Mercado de la Boqueria
Barrio Gótico
El Born Centre de Cultura i Memòria
Palau de la Música Catalana
Plaça de Catalunya
Plaça Reial
Plaza de San Felip Neri
Catedral de Barcelona
Temple d’August
Basílica de Santa Maria del Mar
MOCO Museum
Museo Picasso
Port Vell
La Barceloneta
Nació para dar vivienda a quienes residían en el barrio de la Ribera, desalojados en el siglo XVIII para construir la Ciudadela. En la actualidad a la Barceloneta se va a comer, a tapear, a tomar el sol y a disfrutar de la playa.
Playa Barceloneta
Y también una de las más largas, con un total de 422 metros de longitud. Fue remodelada antes de los Juegos Olímpicos de 1992 y en la actualidad cuenta con diferentes servicios como áreas de voleibol, parque infantil y chiringuitos.
Parque de la Ciutadella
En sus 17 hectáreas encontramos el zoo, el Parlament de Catalunya (Parlamento de Cataluña), una iglesia, un instituto y hasta un lago. El parque de la Ciutadella (Ciudadela) es un espacio donde se celebran ferias, mercados al aire libre y eventos deportivos.
Arc de Triomf
Su forma y proporciones son de estilo clásico pero sus acabados están llenos de motivos simbólicos. Es el emblema de entrada de Barcelona a la modernidad.
Las Ramblas
Se trata de un agradable paseo de 1,3 km que conecta la plaza de Catalunya con el Port Vell (Puerto Viejo). Flores, música, espectáculos, mimos y terrazas definen la calle más conocida de Barcelona.
Gran Teatre del Liceu
Situado en las Ramblas, el Gran Teatre del Liceu (Gran Teatro del Liceo) ha visto desfilar desde 1847 a los mejores artistas de la lírica. Está considerado como uno de los teatros de ópera más importantes del mundo. Una visita guiada puede ser una idea fantástica para conocerlo a fondo y no perder detalle de su belleza. Y, por supuesto, disfrutar de alguna de sus representaciones.
Mercado de la Boqueria
Se encuentra en Las Ramblas y su oferta gastronómica es tan apetitosa que no podrás resistirte a probar alguna de las delicias “gourmet” de sus variados puestos.
Barrio Gótico
El barrio Gótico es una de las zonas con más encanto para dar un paseo y disfrutar de la ciudad. No dejes de visitar la plaza de la Catedral, la calle del Bisbe o la plaza Real y sentarte en alguna de sus terrazas.
El Born Centre de Cultura i Memòria
El antiguo mercado de El Born (1876) es el primer gran edificio de la arquitectura del hierro en la ciudad. En el subsuelo se conserva un yacimiento arqueológico excepcional. A través de los restos de las 42 calles y las 60 viviendas que formaban parte del barrio de la Ribera se puede recorrer la historia de Barcelona desde la época romana hasta principios del siglo XVIII. Inaugurado en 2014, actúa como centro de interpretación de la Guerra de Sucesión y también cuenta con una programación que incluye actividades literarias, teatrales y musicales.
Palau de la Música Catalana
El edificio está situado en el barrio de San Pedro, una de las zonas más bonitas de Barcelona. Es una perla arquitectónica del modernismo catalán y la única sala de conciertos declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. Presidida por el órgano sobre el escenario y con un lucernario central que representa el sol, la sala disfruta de luz natural y se encuentra repleta de figuras y representaciones como las musas que rodean el escenario, las valquirias de Wagner que surgen del techo, un busto de Anselm Clavé a un lado y uno de Beethoven al otro, y elementos de la naturaleza como flores, palmeras o frutos. Es una de las salas de conciertos más singulares del mundo y ha acogido estrenos a nivel mundial, siendo un referente de la música sinfónica y coral del país.
Plaça de Catalunya
Este gran espacio circular se encuentra habitado por fuentes, multitud de palomas y esculturas de artistas tan conocidos como Josep Clarà, Josep Llimona o Josep Maria Subirachs. Fue inaugurada en 1927 por el rey Alfonso XIII y, cuando la ciudad se engalanaba para la Exposición Internacional de 1929, en la nueva plaza se ubicaron algunos de los hoteles, bares y teatros más lujosos de aquella época. Actualmente se encuentra rodeada por algunos de los centros comerciales más importantes de la ciudad.
Passeig de Gràcia
Su rasgo distintivo es haber conseguido el perfecto maridaje entre el patrimonio arquitectónico y la oferta comercial de alta gama.
Aquí se encuentran muchos de los edificios más icónicos de los arquitectos Antoni Gaudí o Lluís Domènech i Montaner, como la Casa Batlló, la Pedrera-Casa Milà, la Casa Lleó i Morera o el Museo Digital Casa Amatller, espacio de referencia dedicado al modernismo en Barcelona.
Plaça Reial
Es una de las plazas más bulliciosas y vitales de Barcelona. Bajo sus pórticos se esconden numerosos restaurantes, bares y algunos de los locales nocturnos más frecuentados de la ciudad.
En el centro del espacio se erigen la fuente de las Tres Gracias y dos farolas, obra juvenil de Antoni Gaudí, que están culminadas por un casco alado y un dragón. A su alrededor, las palmeras reales adornan el enclave y le confieren un toque exótico. Cierran la plaza una serie de edificios señoriales, uniformes y porticados, en los que podemos observar decoraciones con barro cocido. En su día, alojaron la vivienda de importantes familias barcelonesas, aunque hoy este carácter lujoso de la plaza ha quedado matizado por una atmósfera más bohemia.
Plaza de San Felip Neri
La plaza de San Felip Neri (San Felipe Neri) es una joya de difícil acceso que recompensa a todo el que la encuentra. Presidida por su cautivadora fuente y dominada por una iglesia barroca, es un lugar vivo donde las piedras hablan.
Durante la Guerra Civil se lanzaron numerosas bombas sobre la población de Barcelona. Una de ellas impactó en el lugar donde hoy se encuentra la plaza y provocó 42 muertos, la mayoría de ellos niños que se habían refugiado en el sótano de la iglesia. Además, las casas de alrededor quedaron totalmente destruidas. Fue el arquitecto municipal Adolf Florensa i Ferrer, encargado del proyecto de reconstrucción de la zona, quien decidió recrear una plaza. Las cicatrices que dejó la bomba se pueden contemplar todavía en la fachada de la iglesia.
Catedral de Barcelona
Está declarada Bien de Interés Cultural y Monumento Histórico Nacional.
Ocho siglos de historia se esconden entre sus piedras, con un interior lleno de secretos por descubrir. Aquí se encuentran las reliquias de santa Eulalia, patrona de la ciudad, así como uno de los claustros más bellos del gótico catalán. Su interior se haya repleto de tumbas, altares y advocaciones marianas de más de ciento cuarenta santos.
Desde sus terrazas se divisa un panorama muy particular del casco histórico de Barcelona. En la actualidad se pueden visitar y es un plan muy recomendable para todo tipo de públicos ya que se puede subir en ascensor.
Temple d’August
Dedicado al culto imperial a César Augusto, construido en Barcino, colonia romana que pasaría a ser con el tiempo la ciudad de Barcelona.
A finales del siglo XIX se encontraron tres de sus columnas durante las obras de construcción del edificio de la actual sede del Centre Excursionista de Catalunya. Una cuarta se encontraba expuesta en la plaza del Rei (Rey), siendo incorporada al conjunto que se puede visitar hoy en día.
Basílica de Santa Maria del Mar
Mientras en el vecino barrio de la Catedral se encontraba el centro eclesiástico y político, en el barrio de la Ribera -llamado así por su proximidad al mar- se concentraba la población vinculada a la actividad portuaria, cuyos gremios aún hoy podemos evocar a través de los nombres de las calles del entorno.
Se empezó a construir en 1329. El rey Pedro III el Ceremoniós y otros prohombres del barrio aportaron grandes donaciones, mientras que gremios y obreros contribuyeron con su mano de obra a erigir uno de los símbolos de la ciudad. Cabe destacar que este templo inspiró al escritor Idelfonso Falcones su célebre novela “La catedral del mar”.
MOCO Museum
Ocupa la antigua residencia privada que la familia aristocrática de los Cervelló disfrutó desde la Edad Media hasta el siglo XX. Este nuevo museo alberga el arte más vibrante y contemporáneo del momento. Obras de artistas como Andy Warhol, Jean-Michel Basquiat, Banksy, Salvador Dalí, Takashi Murakami, David LaChapelle o Keith Haring, entre otros, se exponen en un cuerpo gótico de espíritu palaciego, evidenciando la línea temporal que une al arte entre los siglos.
Museo Picasso
Un vínculo estrecho forjado en su adolescencia y juventud, y que se prolongó hasta su muerte. La colección, integrada por más de 4.000 elementos, es la más completa que existe del período de formación del artista.
Toda esta muestra de arte vanguardista reposa en el interior de cinco grandes palacios medievales de la calle Montcada que datan de los siglos XIII-XIV y son una excelente muestra del gótico civil catalán.